martes, 28 de abril de 2009

Tenís "sanhenuss" de los chicos...


Mientras escuchaba"las meninas", tema de los Mecánica Popular, y revisaba el Facebook de mi hermana, me enteré de la muerte de un vecino de mi querido barrio Inés de Bazán. Murió Chame, rezaba el post del perfil de mi hermanita, y la noticia me dejó paralizado por unos segundos. Ocupado, pensando en las noticias, en los chanchos, en la crisis, en mis deudas, quise pasar de largo, como tantos, pero noté ese escalofrío del egoísmo. Yo lo conocía; si apenas hace unas semanas atrás lo vi transitar por la Caicumeo hacia Comandante Araya con sus pasos cansados de alcohólico vespertino. Para quienes lean estas líneas, y no conocían a Chame, les cuento que era un cabro como tantos otros de la población, trabajador, maestro enfierrador, soldador, que había dejado de beber hacía algunos años...pero, quién sabe, los trágicos vaivenes de la vida, lo hicieron recaer. Deambulaba como tantos otros de su triste especie, por las tardes de la calle poblacional, como un recuerdo fantasmal de ese que quiso ser, un recordatorio para todos de aquello que nos puede pasar, una bofetada de realidad en nuestras felices vidas cotidianas...Me hizo pensar también en tiempos pasados, cuando, la vida, en una de sus acrobacias quiso que yo también perdiera el rumbo, y trabajando para mi padre, separado y alejado de mi hija, cada tarde llegaba al local comercial a comprar chocolates de 100, Sanhenuss, y una mineral-ojalá fría, cabro, que estoy seco- y nos quedábamos charlando un cigarrito durante algún rato, riéndonos de los cabros chicos o pelando como viejas en salida de misa...
Ahora nuestro barrio tiene un vecino menos, la calle otro mártir ebrio, mi abuela un trabajador menos para sus changas, el negocito de mi viejo un chocolate que se quedó esperando y yo un recuerdo más... Y como la canción que escucho, Chame "sacó su pasaje, pero no sabe dónde..." Y acá, lejos de sus calles, yo sigo escribiendo...